El valle de Benimussa es una de las zonas agrícolas más bellas y singulares de Ibiza. Ocupa buena parte del territorio interior del municipio de Sant Josep y es fronterizo con el de Sant Antoni. Toma su nombre de la alquería de Benimussa, que en el siglo XIV era una de las más importantes de la isla. Antiguamente, esta zona estaba incluso más poblada que otras del entorno de Sant Josep, circunstancia que provocó, en el siglo XVIII, la construcción de la iglesia.
El valle está atravesado por el camino de Benimussa, que arranca desde las afueras del pueblo y termina en distintas zonas de Sant Antoni y Sant Rafel, ya que cuenta con varias bifurcaciones. Es una zona muy pintoresca, repleta de terrenos de cultivo de secano en el llano y en la falda de los montes, donde abundan algarrobos, higueras, almendros y olivos.
Los montes están coronados por tupidos bosques de pinos y sembrados de casas payesas, algunas de grandes dimensiones, como Can Benet, Cas Costes, Cal Tio, Can Xarnebot… El paisaje es pintoresco y la carretera muy tranquila, lo que la hacen idónea para caminar y disfrutar del paisaje sin prisas. Casi al principio del camino encontrarán la plantación de Joan Benet, productor pionero de aceite de oliva en la isla. En el entorno también hay algunos monumentos singulares como los antiguos pozos d’en Benet y de Benimussa, donde todavía se celebran bailes populares en verano, y la Capelleta d’en Serra.