Can Jaume es uno de los establecimientos pioneros del sur. Comenzó hace medio siglo como una pequeña barraca donde un grupo de amigos iba a pasar los fines de semana, cuando en Cala Vedella no había hoteles, ni restaurantes ni prácticamente nadie, salvo algún que otro pescador. Vicent d’en Jaume, en los sesenta, amplió el refugio y construyó un pequeño bar en el que se reunían los albañiles que construían hoteles y apartamentos en los alrededores. Con los años, el negocio fue creciendo hasta convertirse en un restaurante tradicional de cocina ibicenca. Hoy el local está regentado por su hijo Pepe, que lo ha dividido en una zona de cócteles y tapas y en un restaurante de pescados y arroces.