Pequeño rincón de arena y agua de color turquesa, a continuación de Cala Gració
Está situado al oeste de la isla y concentra los pueblos de Sant Antoni, Sant Rafel, Santa Agnès y Sant Mateu
Finca-museo del siglo XVII, con una casa payesa que se mantiene como hace cien años
Laberinto de calles históricas, repletas de palacios y casas encaladas, que ascienden y descienden entre murallas
Pequeña iglesia del centro de Santa Eulària, construida durante los años 50 del siglo XX
Los estanques salineros se explotan desde el 600 a. C. y componen y un ejemplo único de biodiversidad
El templo que los conquistadores cristianos mandaron construir en lo alto de Dalt Vila, en 1235