Pepeta (Pepita), la fundadora del establecimiento, montó un pequeño emporio en este caserío centenario del entorno de Balàfia. A finales del XIX, parte de la vivienda se convirtió en tienda de ultramarinos. Con el tiempo, el negocio se amplió a casa de huéspedes y en el piso superior los niños de la zona acudían al colegio. Al mismo tiempo, fue estanco y oficina de correos. Pepeta, que tuvo que ser una institución, falleció en 1930. La casa pertenece ahora a Pedro Ferrer, que no quiso que perdiera el aire rústico y la adaptó a restaurante. La cocina es muy variada y sigue las recetas tradicionales que se han utilizado en el campo de Ibiza durante generaciones.
Nuestras recomendaciones
De los fogones de Ca na Pepeta salen algunos platos que difícilmente se pueden encontrar en la isla, salvo en las casas particulares del campo. suele haber xerret frito -caramel, un pequeño pescado muy sabroso-, entrada payesa de embutidos, ensalada de crostes y frito de la casa de sobrasada. A continuación, delicias como palomo al horno, guisat de peix, arroz de matanza, arroz con palomo, sofrit pagès o parrillada de pescado.
Horario
De 13 a 16 y de 19,30 a 24 horas
Meses cerrado
Abierto todo el año
Días de descanso
Martes
