Cala Gracioneta es una de las calitas más pequeñas de la isla y, sin embargo, alberga un chiringuito amplio, gracias a las terrazas escalonadas sostenidas por gruesos muros de piedra que se alzan sobre la ladera que envuelve la playa. En sus mesas, a la sombra de los pinos, se come con la vista puesta en el mar y los islotes de poniente. La oferta gastronómica, diseñada por el chef David Reartes, del popular Re.art, se fundamenta en una brasa bien trabajada, donde se preparan carnes de vaca de alta calidad y pescado fresco a la espalda. También recetas mediterráneas, entrantes creativos y arroces.
Nuestras recomendaciones
Entre los entrantes, siempre se puede optar por una ración de sobrasada a la brasa, que está exquisita, o un plato de sirvia ahumada (pescado azul típico de la isla), con patató eivissenc, una verdadera delicia. Las croquetas de sepia y los calamares a la andaluza, muy crujientes, también merecen la pena. Los arroceros disponen de dos versiones a banda, una de marisco y sepia y otra de verduritas. A continuación, toca disfrutar de la brasa: pulpo, pollo payés crocante al limón encurtido, chuleta de vaca madura o pescados ibicencos a la espalda. Para endulzar el final, prueben su versión del flaó.
Horario
Desde por la mañana hasta el atardecer. En verano también cenas.
Meses cerrado
Enero, Febrero, Diciembre
Días de descanso
Abierto todos los dias