Tipología: Cala de piedras redondas en el exterior y arena en el interior, de 300 metros de longitud y 20 de anchura
Situación: A 10 kilómetros de Sant Josep
Playa amplia, con piedras redondas pulidas por las olas del mar, que se salvan con pasarelas colocadas por los afamados chiringuitos de la playa. Dentro del agua todo es arena fina. A lo largo de la orilla hay varios locales muy agradables y con distintos tipos de ambientes, desde el más familiar al más cool, lo que la ha convertido en uno de los lugares de moda de la isla para ir a la playa, comer, cenar o ir de copas. Llama la atención el Blue Marlin, con tumbonas king size a precio de oro y presencia constante de dj’s, que parece más bien un bar de copas de lujo a pleno sol, así como los restaurantes Yemanjá y Tropicana, donde sirven arroces y pescados al borde del mar.
Pese a todo, no es de las playas más masificadas y suele ser frecuentada por yates que fondean en las inmediaciones. También encontrará personas especializadas en dar masajes al borde del mar y pequeños puestos con bikinis, pareos y vestidos.
Desde el verano de 2014 forma parte de un programa experimental de la Unión Europea, destinado a proteger a los bañistas de las picaduras de medusas. Para ello, se han instalado unas redes de protección en los dos extremos de la playa que mantienen la orilla libre de celentéreos.