La historia de Pepín Cardona Pujolet, el propietario del restaurante, está ligada para siempre a Sa Caleta. La pequeña playita rodeada de casitas de pescadores, ubicada a doscientos metros del restaurante, es el lugar donde pescaba su padre y donde luego lo hizo él, hasta que cambió de negocio y se dedicó a servir lo que la mar ofrecía, en un refugio de madera y auténtica atmósfera marinera, con una terraza abierta a la playa de Es Bol Nou. Recientemente ha incorporado un jardín, con tumbonas y mesas a la sombra de los pinos y las sabinas, donde tomar copas. Hay servicio de masajes y los jueves por la noche, en verano, música en vivo. El establecimiento, además, es uno de los pocos chiringuitos que permanecen abiertos durante todo el año.
Nuestras recomendaciones
La carta es muy amplia y cuenta con algunos entrantes deliciosos, como las espardenyes, el pescadito ibicenco frito o las sardinas a la plancha. Pueden continuar con una de sus sabrosas parrilladas de marisco, un bullit de peix, una caldereta de langosta o cigala, una paella de ciego o un guiso de mero. Pueden rematar el festín con un Café Caleta, una suerte de queimada ibicenca muy popular que inventó hace medio siglo el padre de Pepín, cuando servía en el ejército.
Horario
De 13 a 18 horas. En verano, de 13 a 1
Meses cerrado
Abierto todo el año
Días de descanso
Abierto todos los dias