De los agroturismos que hay en Ibiza, Atzaró es sin duda uno de los más espectaculares. Sus muebles étnicos traídos de medio mundo, sus cientos de plantas y flores, sus aromas, sus fuentes, su ubicación en el corazón de la isla y la amabilidad de la familia Guasch, lo convierten en un establecimiento inolvidable.
La vasta finca familiar, próxima a Sant Llorenç, posee una extensión de 100.000 metros cuadrados y concentra 4.000 árboles frutales, una decena de amplias habitaciones en la casa payesa , un spa entre naranjos y un romántico restaurante: La Veranda. El hotel, asimismo, organiza todo tipo de actividades, desde cursos de yoga a salidas en velero, así como todo tipo de eventos y un exitoso mercadillo en invierno los domingos, con actividades para niños, cocina vegetariana, barbacoa…